Tocar un instrumento musical o cantar previene el deterioro cognitivo.

Un estudio de la Universidad de Granada en que que hicieron el seguimiento a 9 personas que habían sido músicos y a otras 4 personas que habían comenzado a tocar algún instrumento, desvelo que las personas que tocan un instrumento musical o cantan pueden  atrasar el deterioro cognitivo mas que las personas que nunca lo han hecho.

Al tocar un instrumento se activan varios sistemas sensoriales como la vista, el oído y el tacto. También se practica la motricidad fina ya que implica apretar un botón o cuerdas al ritmo de la música.

Por estas razones y  otras muchas la practica de la música proporciona una serie de beneficios neurocognitivos, en la memoria, en la atención, en la velocidad de procesamiento y en la capacidad de control.

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